Torneo FIP Rise en Bourg-en-Bresse: Homenaje a Hubert Picquier y Futuro Prometedor del Pádel para 2024
En el mundo del deporte y, más específicamente, en el ámbito del pádel, hay historias que merecen ser contadas. Una de ellas es la de Alexandre Picquier, el Presidente de FIP Rise en Bourg-en-Bresse, quien junto a su equipo fue capaz de organizar un evento de pádel que marcó un hito en la localidad y que podría ir a más en el futuro próximo. Compartamos la trayectoria de este evento, las promesas para el siguiente año y las posibles elevaciones de categoría que podrían llevar a Bourg-en-Bresse a una nueva era del pádel.
Un Tributo Emocional
La competición en Bourg-en-Bresse no fue solo un evento deportivo; fue un homenaje. Hubert Picquier, tío de Alexandre y una figura notable en el mundo del pádel, fue la inspiración detrás de este torneo. Inició su andadura en el pádel siendo vicepresidente de la Federación Internacional de Pádel y el primer oficial electo de este deporte en la Federación Francesa de Tenis. Aunque Hubert ya no esté presente, su legado vive en eventos como el FIP Rise, donde su memoria impulsó a un equipo a superar las expectativas y a sentir un orgullo compartido.
El Bautismo de Fuego
Para Alexandre y su equipo, entrar en la escena del pádel fue un desafío, dada su experiencia previa en el ámbito de los deportes al aire libre y el trail running. A pesar de la inexperiencia inicial, con la ayuda de figuras clave como Franck Binisti y David Matteo, y el soporte de la Federación Francesa de Tenis, el equipo logró tejer una red imprescindible para el éxito del torneo.
La Fusión Perfecta
El evento se destacó por la integración de personalidades de diversos ámbitos, no solo del pádel. Ludovic Collet, Gaëlle Millon y otros contribuyeron a crear una atmósfera única que atrajo tanto a aficionados como a neófitos. Esta mezcla enriquecedora se convirtió en la fórmula del éxito, generando una energía palpable que fue más allá de lo deportivo.
Voluntarios y Recuerdos
La respuesta de la comunidad fue abrumadora, con la memoria de Hubert Picquier como catalizador. Tuvieron que cerrar las inscripciones de voluntarios al alcanzar 90 personas, un testimonio del espíritu comunitario y del deseo de honrar la memoria de uno de los grandes promotores del pádel.
Frente a la Adversidad
La coincidencia del torneo con un Major en Acapulco no disuadió al equipo organizador. Por el contrario, el evento superó las expectativas en cuanto a la participación de jugadores, demostrando que incluso en circunstancias menos favorables, es posible alcanzar el éxito deportivo.
Un Futuro Prometedor
La ambición de Alexandre Picquier y su equipo no se detiene aquí. La posibilidad de organizar un FIP Gold en 2024 está sobre la mesa, lo que podría elevar el perfil del torneo y requerir la adaptación a un nuevo espacio con capacidad para más de 3,000 espectadores.
Integrando a la Comunidad Bressan
El torneo también tuvo como objetivo implicar a la población local, una región que no es tradicionalmente una tierra de pádel. El público neófito vibró con el evento, descubriendo la pasión por este deporte y sentando las bases para futuras ediciones.
Consolidación de la Fecha
El equipo planea mantener el concepto de un torneo indoor al final de la temporada y estudia la posibilidad de ajustar la fecha para que coincida de forma estratégica con otros eventos del circuito, promocionando así el pádel en Francia y en la región de Bressan.
Xan, la Voz del Pádel y del Rugby
Finalmente, no podemos olvidar a Xan, apasionado no solo por el pádel sino también por el rugby. Sus publicaciones reflejan la energía y el estilo ofensivo que caracteriza su presencia tanto en la cancha como en sus textos. Como entrenador físico y escritor, Xan comparte consejos y perspectivas que enriquecen la comunidad del pádel.
¿Será Bourg-en-Bresse, de la mano de Alexandre Picquier y su equipo, el próximo gran escenario del pádel internacional? ¿Qué sorpresas nos deparará la próxima temporada y cómo continuará creciendo este deporte en Francia? Los ojos están puestos en el futuro, y la emoción tan solo está comenzando.